El parto

Al fin había llegado el día. Me levanté de la cama (no se cómo)  y me dispuse a iniciar un nuevo día, uno de tantos iguales que vendrán durante los próximos cinco años (si es que el mundo no se acaba el 2012).

Piso 3, sala 21, y el profesor Bartolucci abre la puerta mientras dice "Romano 04". Y a las 8,15 había terminado el parto y nacía un nuevo universitario. Junto a la gran compañera Valentina Gallardo nos tiramos a la piscina. Entramos a la sala y el profesor se plantó adelante a hablar, del curso básicamente y lo que vamos a aprender. Recuerdo que en vacaciones un amigo me dijo como talla "te imaginas llegar el primer día de clase, y antes que nada, antes que el desayuno y todo eso, te digan: toma acá dos fotocopias, leídas para mañana", bueno, me pasó casi lo mismo, ya que el profesor nos dejó dos guías que había que ir a buscar a la fotocopiadora, y la tarea de repasar historia de Roma para el día siguiente. Luego nos llevaron al salón de honor donde la Jefa de Docencia ya había comenzado a explicar asuntos respectivos  a las notas, los exámenes y otras hierbas. Luego vino una explicación de los bibliotecarios sobre cómo usar la biblioteca, mejor no me referiré a ella. Finalmente salimos al esperado desayuno que estaba bastante aceptable. Cual Howarts, el Decano de la facultad presentó a los profesores, los que luego fueron a sentarse a las mesas con los alumnos. 

Luego de un pequeño recreo volvimos a las salas para una prueba de diagnóstico de "estrategias de comprensión del discurso escrito". Yo de alguna forma estaba bastante feliz de estudiar derecho porque las matemáticas se borrarían de mi vida, pero uno de los textos hablaba justamente del origen de las matemáticas, algo de los axiomas y cosas por el estilo que no recuerdo ni quiero recordar, y luego para rematar, una parte con preguntas de ciencias, física o lógica, cosas así, como "si el granjero Joe tiene ratones gordos y flacos, y ve que unos tienen cola larga y otros negra..." o "si tengo fichas rojas y blancas dentro de una bolsa...". Terminé y subí rápidamente a mi casa porque más tarde tenía que bajar al curso de manejo.

Lo que es yo, me sentí excelente, además de que se refirieran a mi Colegio (entendamos mi Colegio como el de Valparaíso) un buen rato, al relatar el origen de la carrera de Derecho PUCV, porque para los que no saben, tiene su gestación en el curso de leyes SS.CC., de hecho, la insignia de la carrera tiene escrito "SS.CC.". Según el detalle de las materias, parece que Derecho Constitucional va a ser mi fuerte. A ponerle el hombro se ha dicho. Lo único que espero ahora es que salga luego el pase escolar para que los micreros dejen de mirar con cara de asesinos cuando les muestro el del año pasado.

Ahora ya estoy en mi casa, volví con el nuevo libro de Villegas nuevecito de paquete, esperemos que me quede algún espacio libre por ahí para leerlo.

Y así es como parte esta historia, que espero culmine dentro de cinco años cuando egrese y pueda entrar a un mundo totalmente nuevo...pero para eso queda mucho camino por recorrer todavía.