Se ha hablado bastante en estos días de la "arremetida" de Ricardo Lagos en terrenos políticos, esta especie de retorno del mesías que viene a salvar a la Concertación del pecado y de su fenecimiento, eso sí, esta cumpliendo una promesa hecha con su partido el año pasado, en la cual se comprometía a tomar un rol más protagónico en la promoción de nuevos liderazgos. Ahora la pregunta es, ¿cumplirá su objetivo?, ¿o terminará alzándose él como líder de la Concertación en vez de potenciar nuevos liderazgos?. Son preguntas que solamente el tiempo sabrá responder.
Ahora bien, me resulta gracioso cuando hablan de estos "nuevos" liderazgos. ¿Quiénes son estos "jóvenes" que se están tomando la política?, ¿hablan de Carolina Tohá de 46 años o de Lagos Weber de 49?, sin negar la capacidad política que puedan tener, creo que presentar esto como una renovación etárea no me parece lo más acertado, y una renovación de ideas, mucho menos, pues mientras no se haga una evaluación de por qué se perdió y como se quiere seguir caminando hacia adelante, difícilmente se obtengan buenos resultados.
Ahora bien, me gustaría tocar otro tema bastante delicado, pero que ha tenido poquísima importancia y la prensa le ha dado nula preponderancia, y cuyo guaripola denunciante es Tomas Mosciatti, periodista de Radioi Bio-Bio. Hablo de una sucesión de oscuros procedimientos en la aprobación de la termoeléctrica de Campiche.
El gobierno de Bachelet aprobó la construcción de una termoeléctrica en un área verde, de la gigantesca empresa AES Gener. En aquella época, la Contraloría General de la República resolvió que dicha termoeléctrica no podía instalarse en un área verde, cosa bastante obvia, luego la Corte Suprema dijo lo mismo: en un área verde no se puede levantar una termoeléctrica. Todos estos datos, de la ilegalidad de la instalación de esta planta era conocida por los funcionarios de la COREMA (de exclusiva confianza de Bachelet) , quienes eran los encargados de aprobar la instalación y que, finalmente, dieron el vamos.En esta situación, ¿cuál fue la solución que encontró el gobierno?: modificar la ley. Según el decreto supremo 68, se publico el 31 de Dicembre del 2009, el MINVU modifico la ley de regulación urbanística nacional en relación con el uso de suelos para fines productivos, como dijo Mosciatti: Fue un traje exactamente a la medida de AES Gener, el gobierno se transformó en sastre, en sastre perfecto, bailaron al ritmo de los norteamericanos.
Ahora bien, se conocieron unos cables de Wikileaks, en donde el embajador estadounidense en Chile, Paul Simons, se reunió con el gerente general de AES Gener, y luego, con con los ministros de vivienda, interior, economía, energia y medioambiente, ¿y qué hizo?, los alineo a todos para respaldar la central, desde Michelle Bachelet para abajo, todos bailando la misma canción. El embajador norteamericano tuvo más poder que cualquier autoridad chilena, ahora queda mucho mas claro por qué se hizo un traje a la medida de AES Gener.
Artículo 19 de la Constitución de la República, numeral 2: "La igualdad ante la ley. En Chile no hay personas ni grupo privilegiados. (...) Ni ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias;" Aquí el estado de derecho se lo pasaron por donde mejor les cupo, y lo más curioso de todo, ¿por qué la derecha no denunció esta situación?, ¿por qué no usaron la misma parafernalia que con otras situaciones mucho menos graves?, sin duda alguna, aquí todos tienen las manos manchadas, pero el gobierno de ese entonces, tiene manchados hasta los pies, pues contribuyeron a que Chile siga siendo el patio trasero de EE.UU., que esta gente llegue, instale sus empresas a costo del daño individual y medioambiental y se lleven todos los piticlines. Realmente, esta situación es una vergüenza, no más ni nada menos, una verdadera vergüenza.
Dejo dos videos donde Mosciatti habla sobre el tema, gran parte de lo que dije aquí está mucho más profundizado en ellos, por si (y ojala) les interesa el tema:
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